La crostata de calabaza y naranja es una auténtica delicia gourmet otoñal, de esas que nos gustan tanto en Mundisa y seguramente a ti también. A medida que el calor se despiden y las hojas van cayendo, lo mismo que las temperaturas, ¿a que apetecen más algunos dulces maravillosos para tus postres, meriendas gourmet o un desayuno especial el fin de semana?
Por eso hoy te queremos sugerir una receta para que te relajes preparándola, tanto como disfrutarás después saboreándola; la crostata de calabaza y naranja. Con su sencilla masa, parece complicada porque las técnicas son más complejas de lo necesario. Sin embargo, este postre es perfecto para ti si te gusta la calabaza en otoño y si te encanta la naranja amarga; aun así, nadie te culpará si la horneas a tu gusto.
La crostata es un postre sencillo, ligero y delicioso. Se elabora con harina, mantequilla, huevos y fruta o confitura a elegir. Puede disfrutarse como aperitivo, como postre después de la comida, como merienda e incluso en el desayuno.
La crostata de calabaza y naranja es un postre tradicional italiano, perfecto para las fiestas de otoño o Navidad. Con un relleno cremoso de naranja y calabaza, ¡es sorprendentemente ligera y fácil de hacer!
Pero vayamos a lo importante, que es explicarte cómo preparar esta deliciosa receta. ¡Empecemos!
La crostata, paso a paso
Ingredientes:
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- 100 gr de harina
- 50 gr de mantequilla sin sal
- 40 gr de panela (sustitutivo natural del azúcar )
- 1 yema de huevo
- pizca de sal
- ralladura de naranja
- mermelada de naranja amarga
- mermelada de calabaza
Preparación:
Colocar en un bol la panela con la mantequilla a temperatura ambiente y mezclar.
Una vez bien integradas ambos ingredientes con la ayuda de una lengua de silicona, agregar la yema de huevo, la pizca de sal y la ralladura de naranja. Mezclar.
Incorporar la harina y acabar integrar todos los ingredientes de manera homogénea.
Ahora llega la parte divertida, que es formar una bola con la masa, envolverla en papel film transparente, y guardarla en el frigorífico durante 30 minutos.
Transcurrido ese tiempo, retirar la bola de masa de la nevera y comprobar que esté más endurecida.
Entonces, cortamos un poco más de la mitad de la bola de masa y la extendemos con un rodillo, hasta conseguir un diámetro aproximado de 20 cm (dependerá de las dimensiones del molde donde vaya a hornearse).
Recortar el borde de la masa, añadir la mezcla de las dos mermeladas, y con el resto de masa preparar el enrejado típico de las crostatas a masa restante hacemos el enrejado característico de las crostatas (tiras cortadas en forma triangular), y colocarlas sobre la superficie del postre. Mientras tanto, precalentar el horno durante 10 minutos.
Hornear durante unos 35 a 40 minutos (dependerá del horno y del grosor de la crostata).
Al retirarla la crostata del molde, espolvorear con un poco de azúcar glas.. ¡y a disfrutar de un postre otoñal espectacular!