Con la llegada de buen tiempo se hace especialmente apetecible disfrutar de un aperitivo en los momentos de ocio, tanto fuera de casa como en ella. Antes de la comida principal o como preludio de la cena, nada como un buen aperitivo para despertar con gusto el apetito. Y si está compuesto por productos delicatessen, el placer del aperitivo alcanza un nivel que duplica el disfrute.
Hay quien reserva el aperitivo para el fin de semana o las fechas señaladas. Este detalle es indicativo del carácter especial del aperitivo, que en algunos países de Europa es llamado “Hors d’oeuvre”, cuyo significado es “fuera de horas de trabajo”.
Pero, ¿cómo y cuándo nació la brillante idea del aperitivo? Historiadores y gastrónomos no se ponen de acuerdo, ya que el origen depende del país. Parece ser que el término “aperitivo” es una acepción moderna procedente del latín “aperitivus”, que significa “abrir el apetito”. Se comprende pues que esté compuesto de pequeñas cantidades de comida cuya finalidad, más que saciar, sea precisamente todo lo contrario.
Se dice que en España fue el rey Alfonso XIII quien de forma accidental contribuyó a la invención del aperitivo. Parece ser que durante un día muy ventoso en el que el monarca estaba degustando una copa de vino, el camarero colocó una loncha de jamón sobre la copa para evitar que entrase arena. Cuando el rey volvió a pedir otra consumición, la pidió “con tapa”, refiriéndose a la solución improvisada del camarero que al parecer le gustó mucho. De ahí el origen del término “tapas” para referirse a los aperitivos más comunes.
Pero la fórmula para convertir un aperitivo común en un aperitivo gourmet se consigue con los llamados productos delicatessen: el caviar, el salmón ahumado, el foie gras de pato fresco… Bocados exquisitos que consiguen que un aperitivo sea a menudo el mejor momento de la comida o cena.
Canapés de paté: abriendo paso a un aperitivo de altura
Si hay un básico que siempre es bien recibido en un aperitivo gourmet, son los canapés. Aunque su preparación es sencilla aportan un toque de sabor y originalidad con mucha potencia visual, algo esencial para estimular el apetito.
El paté como ingrediente protagonista de los canapés ofrece un abanico de posibilidades por su gran variedad y texturas, como los patés Comtesse du Barry. Estos canapés se pueden preparar untando el paté sobre tostaditas finas y colocando a continuación un rosetón de chutney de cebolla, cebolla caramelizada o mermelada de ciruelas negras espolvoreada con canela.
La otra variedad de canapés de paté del mismo aperitivo la podemos preparar a modo de deliciosas croquetitas redondas. Se forman pequeñas bolas de paté, se rebozan dos veces consecutivas con huevo y pan rallado, y se fríen a fuego medio. Servir en cucharitas de cerámica sobre una base de mermelada de fresas o higos. Comprar paté online en Mundisa brinda la posibilidad de escoger entre las mejores variedades gourmet del mercado, incluyendo Comtesse du Barry.
Otro aperitivo puede estar protagonizado por canapés de foie gras de pato fresco con brioche, un contraste delicioso. Se tuestan las rebanadas de pan de brioche en la misma sartén donde vayamos a dorar el foie. Después de tostadas se untan con mermelada de manzana, reservamos y doramos las rodajas de foie cuidadosamente para que no se derritan. Las colocamos posteriormente sobre el brioche y adornamos con un rosetón de salsa Café de París.
Como bebida para maridar con nuestros dos aperitivos a base de canapés de paté y foie gras de pato fresco, podemos optar por un vino espumoso o cava, un blanco seco de crianza, o un tinto de crianza frutal.
Caviar: el rey de los aperitivos más gourmet
“Si no hay caviar, no es gourmet”. Y aunque eso dependerá también de los gustos personales de cada uno, es innegable que el caviar representa el bocado exquisito por antonomasia. Así es que un aperitivo con caviar como protagonista, como por ejemplo el Caviar Tanit, ya cumple con el requisito para ser gourmet.
Una propuesta de aperitivo para el buen tiempo serían canapés de caviar sobre crême fraîche. Se tuesta el pan en forma de triángulos pequeños, colocamos la crême fraîche en la tostada y encima ponemos el contenido de una cucharadita de café llena de caviar.
La otra variante de canapés con caviar en el mismo aperitivo es prepararlos sobre huevos de codorniz y sobrasada. Se marca la sobrasada en una sartén, lo justo para no que no se derrita. Como base del canapé se preparan porciones de pan cortado en cuadrados y se tuestan. Una vez fritos los huevos de codorniz, se coloca alternativamente sobre las tostaditas la sobrasada, un huevo frito y coronamos con una cucharada de café llena de caviar.
El caviar sobre blinis rusos calientes rociados de cebollino picado son otro aperitivo clásico para los amantes del caviar. Se puede colocar el caviar sobre una base de crema agria o mantequilla para aportar más cremosidad. La otra variante del mismo aperitivo puede ser la degustación del caviar solo, servido frío y empleando utensilios de cerámica o vidrio, nunca de acero. Se tomará a bocados pequeños, del tamaño de una media cuchara aproximadamente.
Como bebida perfecta para maridar con los aperitivos de caviar, el cava o champán muy fríos serán ideales, tanto como nuestros aperitivos gourmet: el sabor más exquisito del buen tiempo.